Una adoracion Centrada en Dios

Mateo 15:8-9

Esto es lo que Jesús quiso significar cuando dijo: “Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran.”

Cuando el corazón está lejos de Dios, la adoración es vana, vacía, y no existente.

La experiencia del corazón es la esencia vital, indispensable y que define la adoración.

¿Por qué la palabra central del Nuevo Testamento para definir la adoración - proskuneo – es prácticamente boicoteada por Pedro, Santiago, Juan y Pablo en las cartas que escriben a las iglesias?

Porque la palabra proskuneo no establecía claramente la naturaleza interna y espiritual de la verdadera adoración. Sólo conlleva connotaciones significativas de lugar y forma. Esta significa: “Postrarse ante”. Estaba asociada con el postrarse corporalmente y con la presencia real de una manifestación visible. Así que es frecuente en los evangelios y en el Apocalipsis donde Jesús esta físicamente presente a los adoradores. Pero en las epístolas la gloria visible de Jesús no esta presente para que se postren ante El.

Por tanto, la tendencia de toda la iglesia primitiva fue tratar con la adoración como algo principalmente interno y espiritual mas bien que externo y corporal; principalmente geográficamente universal en vez de localizado.